domingo, 27 de noviembre de 2011

El Bargueño



   Una de las máximas autoridades en Arte Decorativo en España, la historiadora, María Paz Aguiló Alonso, definió al bargueño como "el tipo de escritorio más propiamente español del Siglo de Oro".

   Es el mueble más bonito y cotizado del mobiliario español. Su origen, digan lo que digan, desconocido: puede que italiano, o chino, o español 100% proveniente de Vargas...¿quién lo sabe?

   El bargueño es un mueble rectangular, de nogal o similar, con asas en los costados y con el frente repleto de cajoncitos. Buscaban un mueble que pudiera transportarse, poder escribir y guardar quizás objetos valiosos en su interior.
Estos escritorios cuentan con compartimentos reservados, llamados “secretos” a los que en principio solamente el propietario puede acceder convirtiéndose en escondrijos destinados a contener documentos importantes.


   El bargueño tuvo su apogeo en los siglos XVI y XVII, y en la actualidad es uno de los objetos más requeridos por los anticuarios europeos, se puede decir que un buen bargueño es una joya.
 
 
   Actualmente se siguen fabricando por artesanos de Valencia (http://www.molero.eu)  y  Toledo (http://www.elbargueniotoledano.com). Aunque los valiosos y que alcanzan altos remates en subastas son los antiguos (españoles y también italianos), merece la pena echar un vistazo a las páginas web de estos fabricantes modernos, los hacen con gusto y con calidad. El que pueda y tenga sitio en casa, que no se lo piense.

jueves, 17 de noviembre de 2011

Alberto Giacometti

Aquí os dejo un pequeño análisis de mercado:
Su escultura “L'homme qui marche l” (el hombre que camina) alcanzó un precio de 74.459.635 euros el 3 de febrero de 2010 en la sala de subastas que tiene Sotheby's en Londres. Sin embargo, no se observa en posteriores remates de obras de este mismo artista, y de características similares, un ascenso de su cotización. La venta estelar de aquel 3 de febrero nos puede llevar a pensar que su precio final en subasta iba a seguir la estela de “L'homme qui marche l”, pero de hecho parece que fue algo puntual, aunque sí que podemos decir que sube la cotización del artista levemente, que no de forma significativa.

Puede que la publicidad que Sotheby's le dio a aquella subasta tuviera algo que ver, ya que presentaban la pieza como algo que se iba a dar una vez en la vida, como una “última oportunidad”, y eso mueve rápidamente el corazón de los coleccionistas.

En mayo de 2010 la sala Christie's, en Nueva York, sacó a subasta varias obras de este genial artista suizo. Como he subrayado antes, su cotización fue más alta que en ocasiones anteriores, pero no hubo sobresaltos ni subidas de precio desmedidas. De hecho, en junio de 2011 la obra de Giacometti quedaba justo por encima del valor estimado mínimo.

100 euros invertidos en 1998 en una obra de Alberto GIACOMETTI (1901-1966) tienen un valor promedio de 490 euros invertidos en enero de 2010”. Esta afirmación no es del todo cierta. Se supone que al haberse disparado el precio de una de sus esculturas, se acrecienta el valor de las piezas ya adquiridas, pero nadie lo puede saber con certeza. Se trata de obras de gran calidad artística, qué duda cabe, pero no son inmunes a las modas, y dependen, como todo, de su demanda, y de que alguien quiera pagar el cuádruple de lo que costó en su día.

En definitiva, y visto el comportamiento del mercado en estos temas, llegamos a la conclusión de que para tasar una obra de arte debemos tener en cuenta estos sobreprecios en subasta, pero no debe ser nuestro único referente.